El profesor mateo además de ser un gran maestro es el ejemplo más claro qué hay entre un buen método de aprendizaje con una vocación para enseñar, la dinámica de aprendizaje que el profesor demuestra en sus cátedras es un reflejo indeleble de lo que es enseñar, que bueno poder encontrar en los entornos académicos personas como el que ayuden a fortalecer la confianza en el conocimiento y el aprendizaje.