La idea de aprendiz y maestro se basa en una idea que tengo sobre la enseñanza. Haciendo en primer lugar la salvedad de que estoy de acuerdo con la idea de que es valioso allanar las diferencias en sentido jerárquico que presuponen una autoridad entre quien enseña como un transmisor de contenidos hacia quien aprende como un receptáculo vacío que recibe información.
Hecha la aclaración, creo que es en algún punto necesario prestarse a esa especie de ficción que se establece en el momento de la clase, para favorecer la pedagogía de cada profesor o docente. En este sentido tanto quien recibe la clase como quien la proporciona, deben comprometerse con esta función que se establece a priori. Creo que esta disposición favorece la puesta en marcha del vínculo pedagógico.
De la mano de la salvedad que hacía al principio, considerando de todas maneras que en momentos posteriores del vínculo establecido, esta suerte de "negociación" puede ir tomando otras formas. Para que esto tenga resultados que favorezcan el aprendizaje tanto del docente como del alumnx es principalmente el primero quien tiene que estar atento a responder al modo en que este vínculo va tomando forma. El objetivo, al menos en mi opinión, es que el proceso sea un espacio cómodo para el alumnx, y que a través de este bienestar generado mutuamente pueda tomar también un rol activo en el mencionado proceso.
Finalmente, la comunicación entre ambas partes debe ser constante y no reducirse al universo de contenidos propuestos por el docente para que el aprendizaje responda permanentemente, dentro del plan propuesto a grandes rasgos por el docente, a las expectativas del alumno