Sin duda alguna, los procesos de aprendizaje se encuentran pasando por una revolución que no se esperaba en la actualidad, pero debido al confinamiento por el cual ha tenido que pasar la población a nivel mundial, los escenarios virtuales se han convertido en la herramienta predilecta para el continuar con la cotidianidad, no solo en los centros educativos, si no también, en las grandes, medianas y pequeñas empresas públicas y privadas. Lo que nos demuestra no solo que es posible, sino también, la ruta a seguir para cumplir con una educación de calidad.
Los principales elementos a tener en cuenta se vinculan directa o indirectamente con la tecnología, debido a que este es el medio de comunicación más optimo en estos tiempos de pandemia. Entre estos elementos de destacan las herramientas digitales como Zoom, Google Meet, Geoogebre, Word, Excel, formularios de google, entre otros. Son de libre acceso y, además, pueden convertiré en un apoyo fundamental para docentes y estudiantes que deseen continuar o reforzar sus estudios desde cualquier lugar de su ciudad o el mundo, siempre y cuando cuente con un dispositivo que le permita conectarse al servicio de internet.
A manera de conclusión se pude decir que en la actualidad son diversas la herramientas en las cuales se pueden apoyar tanto los profesores como los estudiantes para continuar con el proceso de enseñanza aprendizaje a pesar de las circunstancias actuales, pero a su vez, se hace necesario un gran jornada de capacitación en los diferentes centros educativos enfocado en los directivos, profesores y estudiantes para que en la actualidad y en un futuro no muy lejano, se logre una adecuada combinación entre la educación virtual y la presencial.
Esta reflexión permite formular los siguientes interrogantes: ¿Es posible implementar una estrategia curricular en la cual el estudiante decida qué días quiere ir al colegio y que días no? ¿Si el mundo ha evolucionado porque la escuela no? ¿Cómo se puede ayudar a los estudiantes que no cuentan con servicio de internet?