Una técnica de estudio muy común es ponerse música para estudiar para los exámenes o para reforzar los contenidos aprobados en una clase particular. Al final, la buena música para relajar la mente y una mente relajada para estudiar bien. ¿Es cierto en todos los casos?
Música apagada, mente concentrada
Percibimos el mundo mediante los sentidos y esa no es la excepción a la hora de estudiar. El caso más idóneo para estudiar es el silencio, ¿por qué? porque todo nuestros sentidos se enfocan en lo que estamos estudiando. Además eres más eficaz y terminarás tus asignaturas en menos tiempo. ¿Y qué hay si no puedo estudiar en silencio, no porque no quiera sino porque mis circunstancias no me lo permiten?
Ruido incómodo, música en acción
Ahora bien, y ¿qué hay si en mi entorno hay ruidos externos (autos, tráfico, conversaciones, etc) que no puedo controlar? En esos casos si de todas formas vamos a escuchar algo y ello aparte de desconcentrarnos nos está estresando, podríamos cambiar aquél ruido incómodo por un "ruido" agradable, es decir, música. Escucha una música agradable para ti pero que no contenga letras porque sino tu mente intentará cantar la canción al mismo tiempo que intentas estudiar. Sería más o menos como intentar leer dos libros al mismo tiempo. Además que tu rendimiento disminuirá, no digo que vayas a entregar un trabajo de mala calidad sino que te tomará más tiempo en terminarlo. Por ello, preferiblemente escucha músicas sinfónicas y melódicas.
Conclusión
Los consejos anteriores son generales y los casos específicos dependerá de cada persona, del tipo de asignatura, del grado de dificultad de lo que esta estudiando y del tiempo disponible que tenga para terminarlo. Si te organisas bien y eres disciplinado, presentarás tus trabajos a la fecha y de calidad.
