El Canto es considerado una profesión de gran competencia técnica, física y espiritual, para abordar esta actividad, debe pensarse la misma como un fascinante deporte de alto rendimiento.
Cuidar de nosotros mismos es cuidar de nuestro instrumento
Llevar una alimentación adecuada y buen descanso son dos pilares fundamentales para contar con nuestra máxima capacidad.
Es muy útil llevar una rutina de entrenamiento diario en ejercicios de vocalizacion y respiración. Agotar una secuencia de ejercicios dos semanas minimamente para ser capaces de descubrir los beneficios y resultados que cada ejercicio guarda para nuestro intrumento. Encontrar un Maestro que pueda guiarnos técnicamente nos garantiza tanto salud como libertad vocal.
El rompecabezas de una obra en el laboratorio del canto
Como primera medida es necesario saber diferenciar una edición fiel de la partitura que estamos estudiando. Esto nos permite acceder a una interpretación lo más pura posible.
Las ediciones posteriores a las originales en general traen datos agregados por el revisor, estos agregados son a gusto del mismo y terminan limitando la música a una sola versión posible, a una única forma de realizarse. Mientras más hacia atras en el tiempo nos vamos, descubrimos que las ediciones originales contienen el 10 % de la información de la obra en cuestión puesto que se suponía que tanto el estilo como el buen gusto de los intérpretes acompañarían la magia de la música tras el código de la notación musical. Era considerado una ofensa indicarles a los interpretes qué hacer con la música justamente por dicha razón.
Es sumamente importante estar históricamente informados a cerca del estilo del compositor elegido.Nunca está está de más saber datos de la vida y la época de cada uno,el lugar de donde provenían, el contexto ayuda en gran parte a entender y definir muchas cuestiones a la hora de profundizar el estudio y conocer estos datos nos trae información importante para crear una interpretación adecuada al estética de ese entonces. Conviene hacerse la pregunta de qué quería comunicar el compositor en cada uno de los detalles, en la distribución de la musica, las tesituras, el lenguaje utilizado y su direccionalidad.
Me maravilla agotar por repeticiones un compás, agotar una frase musical en unas horas para sacar todo el potencial de ella. La voz debe adecuarse ténica y expresivamente con la finalidad de exprimir el afecto de cada momento musical.
Invertir dos semanas como mínimo en el trabajo del texto de la obra que abordamos, decirlo, recitarlo hasta saberlo sin necesitar leerlo, si es en un idioma ajeno al nuestro conviene buscar el significado y la pronunciación de cada palabra del mismo. Saber el lugar de procedencia del dueño de la letra que vamos a cantar podría brindarnos información a cerca de la sonoridad del idioma, las vocales mas abiertas o cerradas, detalles que harían que la obra cambie por completo. En lo posible debemos hacer investigación minuciosa del autor y los personajes que intervienen en el campo de la obra que vayamos a cantar. La condición psicológica del personaje que encarnamos,si no tiene una historia, debemos inventarla nosotros mismos así podremos acercarnos a la emocionalidad de la obra desde su universo intrínseco plagado de significados y mensajes ocultos latiendo por ser descubiertos.
Detrás del trabajo del texto, encontramos el análisis armónico, este nos cuenta en detalle los afectos que componen el sentido de la misma, nos generan preguntas y decisiones sobre qué hacer para articular cada frase musical. Dentro de las líneas de la estética de cada período y compositor, debemos arriesgar con coraje expresivo nuestra propia interpretación de lo que estamos haciendo con este conjunto de piezas que comprenden una obra nos expande la capacidad abriendo la mirada al abanico de posibilidades colorísticas en nuestro instrumento.